Adquirir ciberseguros se ha vuelto más complicado

A pesar de que los ataques cibernéticos van al alza, así como sus consecuencias en las finanzas de las empresas, cada vez se vuelve más complicado adquirir o renovar un ciberseguro. El principal motivo detrás de esto es que los ciberseguros se han vuelto más caros, sobre todo en el último año, por el incremento de diversos tipos de ciberataques, lo cual ha generado que las aseguradoras endurezcan sus políticas de renovación o de coberturas adicionales.

 

Varias compañías han decidido pedir información más detallada a sus clientes sobre su operación cibernética y muchos de ellos no están en condiciones de satisfacer las demandas  de las aseguradoras. La consecuencia de esto es que las primas son más altas y las coberturas son insuficientes para ofrecer la protección requerida.

 

Un claro ejemplo del encarecimiento de los ciberseguros lo encontramos en Estados Unidos, donde los precios aumentaron un 79% en relación al año anterior. Las primas de las aseguradoras estadounidenses más importantes alcanzaron los 3,150 mdd en 2021, lo cual refleja un incremento del 92% en comparación con 2020. Según expertos, el aumento se debe a tarifas más altas y limitadas coberturas.

 

Las suscripciones de ciberseguros se han vuelto más complejas porque las aseguradoras buscan reducir riesgos al máximo posible y por el gran escrutinio que aplican a las empresas en materia de ciberseguridad. Además, las compañías esperan que las organizaciones que deseen asegurarse tengan una estrategia probada ante un ataque cibernético. También las aseguradoras quieren saber a detalle cuál es la planificación de las empresas y cuál es el respaldo del que disponen ante un ataque de ransomware. Asimismo, toman en cuenta las acciones de protección de todos los dispositivos contra ciberamenazas y la gestión ante cualquier tipo de incidente.

 

Fuente: Füture