LA IMPORTANCIA DEL CONTROL DE LAS EMOCIONES EN EL SECTOR ASEGURADOR

La pandemia mundial y los cambios que ha traído consigo como el confinamiento han sido causa de un sinfín de emociones y trastornos importantes que si no se detectan y atienden adecuadamente puede traer consecuencias en la salud y desempeño de las personas. En el sector asegurador las emociones son parte de nuestro día a día, por lo que hay que aprender a controlarlas para así ofrecer un servicio de calidad y obtener mejores resultados. 

 

El dominio y entendimiento de la inteligencia emocional implica una labor consciente que puede verse reflejada en la manera en la que vivimos y trabajamos, el hacernos cargo de nuestras emociones nos permite enfrentar la nueva realidad desde una perspectiva más madura y preparada. 

 

Dedicar tiempo a la introspección y reflexión sobre lo que sentimos, genera autoconocimiento que nos permite detectar qué factores detonan ciertas emociones, mediante este ejercicio continuo, tendremos información relevante para trabajar aquello que nos afecta y así ser más consciente de cómo nos desarrollamos en todas las esferas de nuestra vida.

 

En la cotidianeidad normalmente estamos tan enfocados en la rutina que difícilmente paramos un segundo para cuestionarnos cómo nos sentimos o qué sentimientos rigen nuestro entorno en un momento determinado. Por supuesto que el autoconocimiento generará dudas y confrontaciones pero es elemental tomar estos aspectos como oportunidades para mejorar nuestra calidad de vida. 

 

Uno de los puntos clave del negocio de los seguros es justamente cómo hacemos sentir a las personas y el impacto que tienen los productos, servicios e información que otorgamos sobre sus decisiones de compra. Sin embargo, para despertar este sentir, es necesario el trabajo personal de las emociones y saber manejarlas adecuadamente. 

 

Existen diversas investigaciones que confirman la eficacia de la inteligencia emocional en el ámbito laboral, generando mayores logros y reconocimiento en actividades personales y profesionales para aquellas personas que la dominan, lo cual se convierte en un factor determinante en los negocios y también en la vida en general.

 

Si aún no eres consciente de tus emociones, no tienes de qué preocuparte, es un ámbito que poco a poco se debe explorar, es decir, en este terreno  podemos entrenarnos. Es por ello por lo  que la inteligencia emocional implica de manera central  la habilidad de reconocer y entender   las emociones de otra  persona  para utilizarlas adecuada y conscientemente.

 

Por todo lo anterior, te compartimos algunas técnicas para mejorar la conciencia, el autocontrol y aprendizaje de uno mismo y de nuestras emociones: 

 

  • Déjate sentir, no juzgues tus emociones sean buenas o malas, identifica de dónde vienen debido a que para poder trabajarlas es indispensable comenzar desde su origen.
  • Observa los efectos de las emociones, qué impacto tienen en tu desempeño ayudará a reconocer qué te incomoda.
  • Sé paciente, antes de tomar una decisión recuerda que todo es un proceso, no tomes acciones sin antes ser consciente de sus consecuencias.
  • Sé amable y observador, analizar el lenguaje corporal de las personas te ayudará a ser empático y detectar qué acciones y respuestas funcionan mejor con tus clientes. 
  • Sé abierto y curioso, investiga e infórmate constantemente del tema para siempre estar actualizado. 
  • Acude a un profesional si lo crees necesario, recuerda que tu salud emocional es esencial para tu bienestar. 

 

Fuente: elasegurador.com.mx